Pues eso, que desde ayer por la tarde estoy en situación de desempleo. En la calle por Navidad. ¡Qué maravilla!
Si es que los maestros vivimos de bien... sobretodo los interinos.
No sólo curramos más que el resto de maestros (llega al nuevo cole, ponte al día, léete informes, planifica, prepara materiales... y no te digo nada si además de ser "la de música" te toca ser tutora de un grupo: curro doble, estrés doble, todo doble), no sólo estamos lejos de casa (gastos de gasolina y/o alquiler, peajes, comida...), no sólo nos pagan cuando y cuanto les da la gana (uno o dos meses con retraso, nos retienen en estas fechas hasta al 35% del sueldo...), no sólo nos llaman y nos despiden cuando les da la gana (véase, el día de antes de las "vacaciones" que, obviamente, para mí no lo son tal), no sólo nos cambian las pruebas de oposición cada X tiempo, los baremos de puntuación, las leyes Educativas (que sí, que cambian para todos, pero los que se las estudian somos nosotros, incluso nos llegamos a estudiar leyes que no se han llegado ni a implantar), no sólo somos "trabajadores de usar y tirar", un número de expediente al que llaman mientras otro se suena los mocos en el sofá de su casa o reposa en lo alto de un cojín esa pierna que le acaban de operar.
Pues no, encima tenemos que estar pendientes de cuándo les dará la vena de llamarnos para empezar a currar. (Inserta aquí tu improperio del tipo "mecagoentó", "hayquejoderse", "yalespodríafollarunpezcolorao", etc). ¡Ea!, A pasar las "vacaciones" pendiente del teléfono. Y claro, como encima te llaman con tanta antelación... "preséntese mañana en..." pues como para irse de viaje.
Tsk... que sí, que tengo mucha suerte por trabajar en lo que trabajo, que me encanta lo que hago, que me lo paso bomba con mis niños, que los quiero, que me quieren, que disfruto...
Pero hoy he venido a quejarme. Ñeñeñeñeñeñeñeñe...
Y eso y un beso, y cosas, y quesos, y demás...
AL.
Ah, y Feliz Navidad : )