Va por ustedes

Dicen que soy de mirada limpia, transparente.

Será de tanto llorar.

Sentada en un viejo sillón, anochece.

Me acompaña una llama que agoniza en un pequeño tronco, inmersas en el silencio, siento.

Siento en mi corazón a toda la gente que dejé atrás, a todas las sonrisas que dejo, a todos los corazones que dejaré.

Gente, personas, compañeros, alumnos... míos. Que lo fueron y ya no lo son. Que lo son y ya no lo serán. Que lo serán y...

A todos, gracias.

Gracias por todas vuestras sonrisas, por vuestros besos, por vuestros abrazos, por vuestras lágrimas, por vuestras dudas, por vuestros enfados, por vuestras alegrías, por vuestras inquietudes, por vuestras respuestas, por vuestras exigencias, por ser lo que sois y haberlo compartido conmigo, gracias.

Gracias por hacerme enfadar y encontrarme conmigo misma, por hacerme reír con vuestras pequeñas y disparatadas historias, por estremecerme con vuestra inocencia y ternura, por conseguir que cada día suponga un reto común, por hacerme crecer... con vosotros.

Porque dando todo lo que soy, aún recibo mucho más. Porque gran parte de mí, la habéis construído vosotros.

Y porque, donde se derrama una lágrima, se contruye un recuerdo eterno.

(10-01-06)